desde el espacio

dejamos nuestro equipaje en tierra
con el resto de la humanidad
para viajar livianos

nos mantenemos en la cápsula
para viajar seguros

y estamos ahí
ausentes de tiempo y espacio

y nos olvidamos de viajar
porque el vuelo ocurre solo

cuando nos quisimos dar cuenta
ya estábamos a un millón de kilómetros

y mirar hacia abajo
no nos daba vértigo

es el vuelo propio
de tu ser
con mi ser

donde el resto de las caras
que están por ahí
se ven borrosas
o nulas

la presencia está marcada
por dos seres dispuestos a volar
sin cuerdas ni cadenas
que nos amarren al pasado

nuestros brazos abrazan al futuro
incierto, por cierto